Desde la comarca
de La Vall d'Albaida saldrán varios autobuses en dirección a Madrid para
participar en la manifestación. Se espera una alta asistencia, tanto de
cazadores como de gente relacionada con este deporte.
La caza no es
solo una actividad necesaria para la propia regulación del ecosistema y de las
especies, sino que, además, es una actividad económica, que genera riqueza y
muchos puestos de trabajo en muchas regiones españolas como Castilla La Mancha,
Extremadura o Andalucía.
La caza en mano
o al salto, los ojeos o las monterías, si hablamos de caza mayor, mueven
cientos de millones de euros en España. Según datos de Fedenca (Federación para el Estudio y Defensa
de la Naturaleza y la Caza), la actividad cinegética generó en 2012 riqueza por
valor de 3.635 millones de euros.
Pero al margen
de los datos económicos que mueve la caza y que son muy cuantiosos, hay que
resaltar, aunque pocas veces se habla de ello, la gran función social que realizan los
cazadores. Por ejemplo, controlando las poblaciones de jabalíes y conejos, que
tanto daño hacen en la agricultura. Se calcula que desde el año 2001 se han abatido más de 56 millones de conejos
y casi dos millones de jabalíes.
El afán
prohibicionista de grupos ecologistas para acabar con la caza es un auténtico
disparate que no se sostiene por ningún lado.
España cuenta
con más de un millón de cazadores. La caza es una actividad deportiva legal y
regulada. Y confíenos que siga siéndolo por muchos años más. Mal que les pese a
algunos.