domingo, 24 de julio de 2022

Vicente Simó

Mi tío Vicente era una persona muy querida por familiares y amigos. Hoy mientras comía en el restaurante Las Eras se me ha acercado una persona que le conocía y al saber que yo era sobrino suyo, me ha dicho que era una persona excelente y de trato muy cordial. Cuando pasaba él, todos se ponían firmes, ha dicho bromeando. Es un honor para mí pertenecer a una familia que sigue siendo muy querida y respetada en Ontinyent. Pepe, que así se llama la persona que se ha acercado a saludarme, trabajó en Vidal y en Más y Más. Mi tío Vicente iba todos los días a recoger las sobras de fruta y verdura para dárselas a los animales que tenía en su finca. Había toda clase de animales y aves. Desde jabalíes, muflones o venados hasta cisnes, pavos reales o tucanes. Era un paraíso cinegético enclavado en Ontinyent. La pinada contaba con gran variedad de árboles. Sauces y pinos centenarios. Debajo de cada uno de ellos figuraba el nombre y el país de origen. En la finca había dos lagos con patos y cisnes. Un puente de madera, que recordaba a las películas de Tarzán, cruzaba de una punta a otra. Su gran afición a la caza sobre todo a la caza mayor, con constantes viajes a África en los años 60 y 70 le hizo entablar una gran amistad con el entonces Rey de España, Juan Carlos I. Tal es así que la infanta Cristina pernoctó varias veces en su casa de Ontinyent, La Clariana. Pero mi tío Vicente siempre fue una persona sencilla, cercana, que jamás hizo ostentación de nada. Su casa era un auténtico museo con cuadros de Sorolla, Pinazo y una de las mejores colecciones de cerámica de Manises del siglo XVIII que se conocen. Muebles que eran auténticas joyas. Cuadros religiosos de la escuela de Ribera. Un armero con multitud de escopetas y rifles. Entre ellos un Holland&Holland, calibre 500, que después regalaría al Rey. A mí también me regaló dos escopetas paralelas, una de perrillos. También contaba con una maravillosa colección cinegética. Alguno de estos ejemplares, ya no se han vuelto a editar. Son ediciones únicas como Veinte años de Caza Mayor del conde de Yebes. Cuando iba a verle siempre hablábamos de caza y de sus viajes a África. Me contaba innumerables anécdotas de sus periplos cinegéticos. La adrenalina que generaba cuando iba detrás de un elefante o un león. Es agradable saber que tanto tiempo después de haber fallecido todavía haya gente que lo recuerde y con tanto cariño.

sábado, 23 de julio de 2022

Corren malos tiempos para la perdiz

La perdiz ha criado muy mal este año, al menos, aquí en Fontanars dels Alforins. No sé si la situación será generalizada en el resto de España, pero no creo que con media España en llamas, las perspectivas sean mucho mejores. He hablado con varios cazadores de la zona y todos me dicen lo mismo. A penas se ven bandos. Yo que ando con el tractor todo el día para arriba y para abajo, solo he visto dos bandos. Uno de ellos solo llevaba un perdigón y en el otro pude contar tres. Pero no solo ha criado mal la perdiz, también otras especies como el jabalí muy prolíficos en cuanto a número de crías, con siete u ocho rayones, apenas llevan uno o dos. La ola de calor de estos días ayuda bien poco a que las perdices salgan adelante porque hay polladas más atrasadas que están saliendo ahora. De ahí la importancia de que en los acotados no falte agua. En esta época del año, las charcas o codollas como las llaman por aquí deben estar llenas. Más importante incluso que la comida es el agua y con el calor que está haciendo todavía más. Los animales como los humanos sin agua no sobreviven. Todas las semanas hay que repasar las charcas que hay diseminadas por el acotado para rellenarlas con la cuba en caso de que sea necesario. Que la perdiz salvaje está en pleno declive es algo que los cazadores sabemos desde hace tiempo. No hacen falta estudios que lo atestigüen. ¿Está la perdiz en peligro de extinción? El organismo UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), la ha incluido en la lista de especies casi amenazadas, a un paso para que se prohíba su caza. Este organismo ha utilizado datos aportados por la asociación ecologista SEO/Birdlife. Datos que han sido considerados incompletos por otras organizaciones. Hay que separar la ideología de lo que son datos empíricos. La agricultura intensiva, la proliferación de alimañas como: la zorra, el jabalí o la urraca, la suelta indiscriminada de perdices de granja, sin ningún tipo de control sanitario o la pérdida de su hábitat natural, como son los linderos son factores que han ayudado a que la perdiz se encuentre en clara regresión. Hasta el punto de considerarla una especie vulnerable, amenazada o en peligro de extinción como señalan algunos estudios, no creo. Estos informes se mueven más por motivos ideológicos que por datos contrastados, cuya única finalidad es acabar con la caza. Pero, sin duda, es tarea de los cazadores revertir esta situación y que la reina de la caza menor vuelva a poblar nuestros campos y montes.

martes, 12 de julio de 2022

Codorniz híbrida

Ha habido mucha polémica en torno a la codorniz. Desde hace unos meses no se pueden soltar codornices en los campos de tiro para luego ser abatidas. Son las tradicionales tiradas de codorniz a tubo que tiene defensores y detractores. Al parecer la codorniz que se soltaba procedía de China y no es genéticamente compatible con la codorniz autóctona. Muchos han entendido esta decisión como el primer paso para su completa prohibición y no van del todo muy desencaminados. Desde el pasado mes de junio, las tiradas que había programadas han sido suspendidas. Las granjas cinegéticas que hasta ahora suministraban esta ave a los campos de tiro habrán tenido que sacrificar a todos estos animales. Estamos hablando de cientos de miles. Esta codorniz se cría en las granjas para luego ser vendidas a los campos de tiro o bien para jornadas de caza que sirven de entrenamientos a nuestros perros. Se da, además, la circunstancia de que la codorniz, según algunos estudios, es una especie amenazada y cuya población ha descendido drásticamente en los últimos. Unos estudios en los que no todos están de acuerdo. Con todas mis reservas hacia esta modalidad deportiva que respeto, pero no comparto, tanto las tiradas de codorniz a tubo, también de pichón, como las tiradas de pichón a brazo y a caja tienen los días contados. Portugal y España eran los únicos países hasta ahora donde se podía tirar pichón a caja. Portugal acaba de prohibirlo recientemente. Hace ya muchos años que Italia, donde se encuentran las mejores escopetas del mundo decidió prohibirlo. Muchos tiradores procedentes de estos países visitan todos los años España para poder tirar al pichón a caja. España no tardará en prohibirlo porque al final son normativas europeas que hay que cumplir y no es tanto una decisión del propio país. Considerado como maltrato animal por muchas asociaciones ecologistas, la nueva ley de Bienestar Animal puede ser la puntilla que ponga punto final a las tiradas de pichón y codorniz en nuestro país.

lunes, 4 de julio de 2022

La importancia de la concentración en el tiro al plato

Los que llevamos algunos años pegando tiros, sabemos la importancia de una buena concentración. Cualquier despiste, te cuesta un cero. Si vas al campo de tiro con problemas, mejor que te quedes en casa y ese día te dediques a otra cosa. De hecho, grandes tiradores de la selección nacional como: Fátima Gálvez, Jesús Serrano Lara, Alberto Fernández o Antonio Bailón tienen un equipo propio de psicólogos que les ayudan a superar situaciones de tensión que se puedan dar, por ejemplo, ante un desempate donde te juegas una medalla de oro en un mundial. Hay que tener los nervios muy templados y eso se consigue a base de técnicas y también tras muchas horas de entrenamiento. No estamos ni mucho menos a ese nivel, pero sí es bueno entrenar algunos ejercicios de relajación antes de comenzar una tirada. La respiración es muy importante. Yo que suelo tener problemas de ansiedad bastante severos, noto cuando sé que voy a tirar bien. Este sábado fue uno de esos días. Nada que ver con la semana anterior que sume un 20 y un 16. Este último sábado en cambio tiré tres series bastante más tranquilo y, sobre todo, muy concentrado en cada plato. Los resultados fueron muy buenos: 22,21 y 25. Me vine más contento que unas pascuas.
Me he dado cuenta de que la mayoría de los ceros los sumo en los últimos platos de cada serie. El otro día, por ejemplo, erré el 20º y el 24º en la primera serie y el 24º en la segunda. Eso me ocurre porque estoy muy pendiente de los resultados. Desde hace muchos años me apunto en un papel que luego paso a una hoja Excel todas las tiradas en las que participo, tanto de entrenamientos como de concursos, y anoto los resultados. Eso me lleva a un nivel de exigencia bastante alto porque compito conmigo mismo, lo cual es bueno y malo a la vez. Empecé a anotar los resultados en el año 87 cuando tiraba con una repetidora Beretta. Desde entonces y hasta el día hoy no he dejado de hacerlo ni una sola vez. Cuando rompo menos de 20 platos, lo subrayo en rojo y si ese día tengo la suerte de cara y consigo un 24 o un 25, le añado a la casilla un gif con el pulgar hacia arriba. El tiro al plato como cualquier deporte tiene sus técnicas y es bueno no solo conocerlas sino ponerlas en práctica. Cosa que no siempre hacemos. La teoría prácticamente la conocemos todos, pero una vez estás en el planché es el momento de demostrarlo y de aplicar los conocimientos adquiridos. Por eso, errores tan frecuentes como pedir el plato y cuando no sale a la voz, en lugar de bajar la guardia y volver a pedirlo y encarar, hacemos todo lo contrario, es decir, volvemos a pedir el plato, pero sin bajar la guardia, lo normal es que lo fallemos. Otro error muy habitual es pedir el plato, sabiendo que tenemos la escopeta mal colocada. Lo más fácil es que fallemos. Vale la pena perder un poco de tiempo y pedirlo, pero con la escopeta bien encarada, igual lo erramos, pero no será porque teníamos mal colocada la escopeta, que como digo suele ser un error muy común entre los tiradores más avezados. Otra cosa que conviene hacer y que casi nunca hacemos es plomear la escopeta para saber dónde van los tiros. Lo normal es que fallemos por detrás, pero podemos quedarnos por arriba o por abajo. Hay escopetas que tienen tendencia a levantar el tiro porque te dan más ventaja que si lo hace bajo porque el plato tiene tendencia a subir. Es el caso de las Perazzi. Me refiero en días tranquilos, donde no haya demasiado viento porque luego está el factor viento que juega muy malas pasadas, y nos saca de tiro, incluso a los tiradores muy rápidos. Cuántas veces hemos apretado el gatillo y hemos observado como el plato remonta y el tiro se queda por bajo. O a la inversa, que el viento los acache, normalmente cuando sopla trasero y erramos por arriba.